martes, 31 de marzo de 2015

QUE LA TIERRA TE SEA LEVE MACU


La noticia, no por esperada menos dolorosa, me llega en Denia: Jose,  Macu nos ha dejado (decía el mensaje). Me siento raro, con sensación de estar confuso, triste y jodido.

La última vez que te vi fue en el 1 de Mayo, nos contabas a mi hermana y a mí las ganas que tenías de luchar y de vencer al maldito bicho que tenías en la cabeza. Tenías como siempre una energía desbordante. No puedo evitar emocionarme al recordarte sonriendo. A pesar de todo sonriendo.

Te quiero pedir perdón, no he sido capaz de subir a verte, he sido un cobarde y no me he podido despedir de ti, ese dolor me lo llevaré para siempre. Sé cómo has peleado, cómo has estado haciendo planes de viajar, de vivir hasta el final. Así eras tú, positiva, alegre, con una energía como pocas personas he conocido.

Desde pequeño, te llamaba mi segunda madre y así te comportaste conmigo. Recuerdo los días en el comedor, donde tantos años cocinaste. Recuerdo cuando me decías que cuidara mi relación con mi padre. Recuerdo cuando al volver de Madrid me animabas a marchar a Sevilla, a buscar mi sitio, a trabajar mi espiritualidad, mi Yo interior. Cuánta sensación de sabiduría me transmitiste siempre, de paz, de sosiego.

Siempre te voy a recordar como una mujer moderna, aventurera, abierta, solidaria, trabajadora y muy positiva. Posiblemente de las personas más positivas que nunca he conocido y conoceré.

Cuidaremos de Sara por ti, ahora ella es la que importa, la que más va a sentir tu perdida.

Descansa en paz Macu, que la tierra te sea leve, dejas un gran vacío a muchísima gente.

Pájaro que tiene personalidad, quiere el aire, el riesgo de la libertad. No le van las jaulas, no le van (Pedro Casaldàliga).